El cerezo procede del Japón de la familia Prunus del subgénero Cerasus. El cerezo tiene una flor tan bonita y tiene una floración tan extraordinaria de colores blancos y rosados, que Japón ha hecho de estos árboles ornamentales una de sus señas de identidad.
* Los cerezos de flor exigen pleno sol
* El sustrato les gusta moderadamente fértil y bien drenado
* Podar las ramas secas y son bastante sensibles a las podas drásticas
* Son propensos a sufrir plagas de pulgones, orugas y minadores por lo que estaremos atentos para su tratamiento con insecticida.
* No les gustan ni los vientos fuertes ni la brisa salina
Cuando los cerezos florecen, las multitudes se reúnen de día y de noche en los parques públicos de Japón para disfrutar de lo que ellos llaman el “hanami” o “contemplación de las flores”.
Esta fiesta de las flores del cerezo se celebra también en ciudades como Washington y Toronto.
En España, es un espectáculo observar su floración en lugares como el valle del Jerte, en Cáceres, el valle de los Caderechas en la comarca de la Bureba, Burgos o el valle de El Fresno en Zaragora.
En Navarra se pueden observar tanto en el valle de Etxauri como en la zona de Milagro.